miércoles, 6 de enero de 2010

Viena 1945

Hay niebla, hace frío, todo está oscuro en la Viena de 1945, donde traficantes, contrabandistas, soldados, policías y demás aventureros se juegan su destino cada día, una música, una melodía que lo preside todo, al son de la cual bailan unos y otros y sobre todos Harry... Nunca una música estuvo tan vinculada a una película como en este caso, disfruten:

1 comentario:

  1. Hola

    Me parece super interesante tu blog.
    Quería hacerte una consulta. Verás, actualmente estoy realizando un pequeño trabajo de investigación sobre la Música, Gestalt y Meditación. He conocido por comentarios de otras personas y por experiencia propia, que ciertas músicas e instrumentos, nos afectan más en determinadas zonas del cuerpo, por la razón que sea. Por ejemplo, la percusión y los sonidos graves que de ella se desprende tienen un interesante impacto en la zona baja del cuerpo, las extremidades inferiores y la zona genital. Así como los sonidos del Duduk y otros del estilo parecen ir más dirigidos al estómago y pecho y las melodías de violín y piano menos graves parecen envolver más la parte alta del cuerpo, pecho y cabeza, movilizando más la energía y las emociones en esas áreas. De forma que parece que hay una relación entre la utilización de ciertas músicas y el trabajo con ciertas emociones digamos que arraigadas en ciertas partes del cuerpo. Lo instintivo, lo visceral, lo espiritual.

    Después de toda esta parrafada, ¿podrías decirme si conoces algún tipo de referencia en donde se hable algo de esto?

    Un saludo y gracias de antemano.

    Diego

    ResponderEliminar